EL VACÍO DE TU PRESENCIA.

¿Qué le digo a mi corazón que extraña escuchar tu voz susurrando "te amo"? ¿Qué le digo a mis labios que sueñan con sentir el calor de los tuyos, hasta desmayar en un último aliento? ¿Qué le digo a mi alma, que anhela abrazarte y contigo despertar cada mañana? Le diré a mi corazón que aguarde paciente, que el eco de tu amor aún resuena en sus latidos. Le diré a mis labios que recuerden el sabor de tus besos, guardando su ternura como un secreto sagrado. Le diré a mi alma que la distancia no apaga la llama de nuestro amor, y que en cada sueño te encuentra y te guarda. Porque aunque no estés aquí, cada suspiro te nombra, cada latido te reclama, y en cada rincón de mi ser, vives tú, eternamente.